Cuba en coche se disfruta de una manera especial, al ritmo de la propia isla. Será la mejor manera de disfrutar de un país de resonancias casi míticas, joya de la corona española y gran referente revolucionario en todo el mundo. Al margen de sus vaivenes políticos, te encontrarás con un plácido territorio de gran belleza natural salpicado de ciudades que conservan todo su encanto añejo.
Viajarás en este ruta desde La Habana hasta Santiago de Cuba, las dos grandes capitales del país, y entre medias descubrirás los centros históricos de Cienfuegos, Trinidad y Sancti Spíritus. Además, habrá tiempo si lo deseas para descansar junto a playas frecuentadas en el pasado por corsarios y piratas.
Como puerto clave del Caribe, La Habana ha poseído históricamente una vibrante escena cultural abierta a influencias variopintas: española, caribeña, estadounidense, soviética… En su música es fácil de percibir y también en su menos conocida faceta artística. El Museo de Bellas Artes, por ejemplo, resulta toda una sorpresa, con una amplia colección que abarca desde los egipcios y sumerios hasta obras de destacados de pintores europeos y norteamericanos, mientras que en el «laboratorio de creación» F.A.C. de arte contemporáneo, que ocupa una antigua almazara, es donde Cuba quiere ser moderna y, como siempre, a su manera.
Al entrar en la capital del Oriente, Santiago de Cuba, descubriremos una ciudad ruidosa y vibrante, con un fuerte componente cultural afrocaribeño. Aquí inició Don Facundo Bacardí su imperio alcohólico y Fidel, la Revolución. Muchos de los ritmos caribeños que tan lejos han llegado por todo el mundo dieron en esta ciudad sus primeros pasos. Así que, una vez más, déjate llevar.